martes, mayo 09, 2006

Uno de esos días


Uno de esos días, un día
en que el reloj biológico
se nos trastocó en una noche
de desvelos y recuerdos.

Cuando los Fantasmas del Ayer
nos visitan inesperadamente
y nos relatan acontecimientos
que desconocíamos del pasado
y en los sueños nos cuentan
de hechos futuros que vendrán.

Cuando no sabemos que decirles
a la gente que encontramos
en este Carnaval de la Vida
y vamos inmersos en pensamientos
dilatantes y acciones incoherentes.

Uno de esos días, cualquier día
me marcharé de aquí para siempre,
haciendo honor y dando fe
a lo que por Ancestros Heredé;
o tal vez por Atavismos:
un Alma Aventurera
con Espíritu de Emigrante.
Uno de esos días, cualquier día
me marcharé de aquí para siempre.


Guayaquil, febrero 24 del 2004