martes, mayo 09, 2006

Guitarra Nueva






EL AUTOR

Conocí y aprecié a Galo Roldós desde cuando yo tenía apenas un cuarto de siglo y él no contaba más de diez u once años. El penúltimo de una familia maravillosa a la cual me ligan afecto y recuerdos penas, y alegrías. Lo traté mucho luego, especialmente en los años 1957 y 1958, cuando tenía gran fervor por libros teorías y proyectos fervor que ha mantenido siempre. Conversábamos acerca de muchas cosas durante largas veladas y aún más largas caminatas por las calles de Guayaquil. Galo ha sido un autodidacta un asiduo lector un hombre de alma pura sonrisa a flor de labios y mano cordial. Alguna vez frecuento mucho la vida social guayaquileña, en la cual tuvo un papel de primer orden. Pero con el paso del tiempo y sus días su Jerarquía de valores fue depurándose volviéndose cada vez más exigente. Prefirió entonces -y así ha continuado hasta hoy- la cultura, la letra impresa las satisfacciones superiores del alma. Ha vivido, ha amado ha laborado. Ha sido un hijo padre y esposo tierno. Un hermano solidario. Un amigo de todos sin prejuicios ni discriminaciones.

De pronto sintió que tenía algunas muchas cosas que decir; Y las ha escrito. En prosa y, especialmente en verso así las palabras fueron creciendo fueron adquiriendo la urgencia de imprimirse y de llegar a todos. Adquirieron así una suerte de corporeidad sus vivencias, sus ternuras, sus sueños.

Con las remembranzas de un pasado nostálgico que en muchos de sus aspectos se actualiza he leído estos poemas la mayor parte ya aparecidos y otros inéditos que se publican ahora bajo el nombre común de "Guitarra Nueva".

Esta guitarra echa a volar melodías y palabras la mayor parte de las cuales conozco en sus motivaciones, porque las personas y las cosas a las que Galo se refiere, han integrado mi horizonte también, su madre, una de las personas a las cuales más quiero y admiro; su familia. a la cual siento propia; poblaciones de la patria común. a las cuales mi sandalia de peregrino ha llegado también; Guayaquil, a la cual Galo como yo llevamos muy enraizada en el alma.

Estos versos han sido escritos con amor y con dolor sentimientos a los cuales me referí alguna vez como "las grandes coordenadas de la. vida". Galo prefiere el verso libre a la métrica. Comprende que así su expresión se desarrolla con mayor espontaneidad. Ha sentido como él mismo nos asegura que los versos corren en su alma como las aguas en el río.

Que esta guitarra siga haciéndose escuchar con nuevos sones. Que comunique su mensaje y sus ecos. Que siga siendo su amiga su confidente su universo. Que el lirismo -ya qué Galo es sobre todo un lírico-; que la llama que lleva en él suba, ascienda mucho más que donde ha llegado: ese es mi deseo para él y motivo fundamental de estas palabras fraternas y admirativas.


Manuel de J. Real